Sibiu – La ciudad que todo lo ve
Sería el calor, el contexto, la edad… o lo que fuera, pero cuando estuve en Sibiu por primera vez, no supe, o no pude, valorar lo que tenía delante. Por suerte, la vida me permitió volver años después y, esta vez sí, disfrutar de la que es una de las ciudades más espectaculares de Rumanía. Aquí te cuento qué ver en Sibiu, una localidad donde los tejados te vigilan.
La última vez que conversamos sobre el país rumano fue acerca de Biertan, un pueblo turísticamente conocido por albergar la iglesia fortaleza más importante de las 150 que todavía perduran en Transilvania. A unos 70 kilómetros de Biertan está Sibiu, la ciudad que todo lo ve.
Índice de contenidos
Sibiu, un imprescindible de Transilvania
Son tantas las paradas que empiezo a considerar obligatorias en una ruta por Transilvania que vas a necesitar un mes de viaje para hacerlas. Pero si no tienes ese tiempo y solo puedes dedicarle unos días a esta zona, entonces, sí o sí, que no falte Sibiu. Con algo más de 130.000 habitantes, su centro histórico fue restaurado y peatonalizado en 2007, año en el que fue elegida Capital Europea de la Cultura junto a Luxemburgo. Con todo, para mí uno de los cascos antiguos más completos de Rumanía.
Cómo ir a Sibiu
Aunque tiene aeropuerto, no hay vuelos directos desde España a Sibiu, por lo que lo más cerca que puedes llegar vía aérea es a Cluj-Napoca, a unas dos horas, o a Bucarest, a unas cuatro. No obstante, lo habitual es incluir Sibiu dentro de un itinerario por la región, por lo que seguramente vayas allí desde Brasov o Sighisoara, dos habituales. Desde cualquiera de las ciudades mencionadas puedes ir en tren o autobús hasta Sibiu o como parte del algún tour como este, aunque el coche de alquiler es una buena opción para moverte por el territorio rumano.
Ver coches de alquiler en Rumanía
Dónde dormir en Sibiu
Desde el punto de vista turístico, Sibiu no es muy extensa, por lo que puedes verlo casi todo en menos de un día. Ahora bien, y permíteme que insista, bonita es un rato, y de noche tiene un toque especial, por lo que yo recomiendo una buena pernocta. Si te encaja el plan, aquí mis recomendaciones.
- Si vas solo y buscas un hostal económico, el B13 es tu aliado. Por unos 15 euros tendrás cobijo en sus dormitorios compartidos.
- Si vas acompañado y prefieres algo más íntimo, pagar los 60 euros que vale la habitación doble en el Class Hermannstadt es una buena decisión.
- Si tienes más presupuesto, entonces échale un ojo al hotel Marabella Art. 90 euros cuesta la estancia para dos.
- En el viaje fotográfico que organicé por Rumanía llevé al grupo al hotel, quiero decir, hotelazo Hermanns. ¡Una pasada!
Breve historia de Sibiu
Y antes de ponerme de lleno con las recomendaciones de qué ver en Sibiu, déjame que te cuenta un poquito sobre su historia, interesante y revuelta como las de mayoría de sus vecinas. Sí, efectivamente, una vez más, fueron los colonos provenientes de Alemania en el siglo XII los que le dieron vida. Para no mentir, los romanos, y antes de los romanos, los dacios, y antes de los dacios, los del neolítico, ya habían hecho sus pinitos, pero la ciudad en sí es obra de los sajones que le otorgarían el nombre de Hermannstadt.
Al igual que pasó en Sighisoara, en el siglo XIV los gremios adquirieron un papel fundamental en Sibiu y la convirtieron en el principal asentamiento de los alemanes en Transilvania durante bastantes años. Recuerdo que, por aquel entonces, este territorio era parte del reino de Hungría, pero dos siglos después, los otomanos se pusieron a repartir estopa por el área y provocaron su división en tres principados.
Pues bien, la importancia de Sibiu fue tal que la ciudad llegó a ser capital del Principado de Transilvania entre 1692-1791 y 1849-1865. En esos siglos en Sibiu se fundó la primera fábrica de cerveza, el primer teatro, la primera línea ferroviaria y fue la primera que usó electricidad de la actual Rumanía, país al que pasó a formar parte (al igual que el resto de Transilvania) tras la Primera Guerra Mundial.
Qué ver en Sibiu
Ahora que tenemos un poco más claro (al menos yo) los entresijos históricos de Sibiu, me pongo ya a enseñarte sus encantos. Para ayudarte a organizar tu ruta, ten en cuenta que la urbe tiene dos partes claramente diferenciadas: la ciudad alta (orasul de sus) y la baja (orasul de jos). Y aunque este nombre se debe a la diferencia de altitud real que hay entre ambas, unos 15 metros, perfectamente podría ser por una cuestión de clases, ya que la alta es también la más rica. Te adelanto que los principales atractivos turísticos de Sibiu están ahí, ya que en ella se han concentrado la mayoría de las actividades económicas de la ciudad.
Piata Mare – La Gran Plaza
Qué mejor lugar para hacer negocios que una buena plaza, o mejor aún, tres. Y es que si quieres ir a lo seguro en Sibiu, pásate por cualquiera de las plazas del casco antiguo. Con 142 metros de largo y 93 de ancho, en la Gran Plaza tienes mucho para hacer, aunque solo sea sentarte en un banco y ver como la cotidianeidad y los turistas se entremezclan. En sus edificios más icónicos, destacan:
Palacio Brukenthal, un museo decano que ver en Sibiu
El palacio fue levantado por y para el barón Samuel von Brukenthal a finales de siglo XVIII. Este magnate era el gobernador del Principado de Transilvania por aquel entonces, y, por lo que sea, amasó perricas y una inmensa colección de arte. Aunque en vida ya abrió las puertas de su humilde morada para que los mundanos pudieran ver su colección, en su testamento ordenó la apertura del palacio como museo público en 1817. De esta forma, el palacio Brukenthal se convirtió en el primer museo del actual territorio de Rumanía, función que sigue desempañando en la actualidad.
La iglesia de la Santísima Trinidad
Algo más antigua es la vecina iglesia católica de la Santísima Trinidad (biserica Sfânta Treime), construida por los Jesuitas a principios de siglo XVIII. De estilo barroco, alberga tres enormes campanas en sus 47 metros de torre. Como curiosidad, estas campanas, colocadas originalmente en el XIX, fueron confiscadas y fundidas en 1916 (qué casualidad, durante la Primera Guerra Mundial) y restauradas unos años después.
Piata Mica – La Pequeña Plaza que ver en Sibiu
Pared con pared a la Gran Plaza está la Pequeña (piata Mica), de la que solo nos separa un pasaje bajo la torre del Consejo de la que hablaré a continuación. Como su propio nombre indica, esta te la terminas antes, pero no tiene nada que envidiar.
La torre del Consejo – El mejor mirador que ver en Sibiu
En realidad, la torre del Consejo (turnul Sfatului) es también visible desde la Gran Plaza, pero si quieres acceder a ella tienes que hacerlo desde la piata Mica. Esta torre originaria del siglo XIII, aunque ha recibido muchas restauraciones por el camino, recibe este nombre por estar ubicada junto al que fue durante siglos el ayuntamiento de Sibiu, hoy en día el hotel Council. Sus 71 metros de altura ofrecen la mejor panorámica de Sibiu y de ella solo te separan 2 lei (0,40 €) y 141 escalones.
Podul Minciunilor – El puente de las Mentiras
Si continúas deambulando por la Pequeña Plaza terminarás llegando al llamado puente de las Mentiras, un paso peatonal entre esta plaza y la consiguiente Huet. Esta pasarela de hierro fundido fue terminada en 1859 y su nombre es una confusión lingüística. Como el puente no estaba construido sobre pilares, en alemán se le llamó Liegenbrücke, que traducido significa puente Tumbado, palabra casi homófona con Lügenbrücke, puente de las Mentiras. Mentiras son todas las leyendas que se crearon después para explicar su apodo como la que dice que se puede derrumbar si sueltas alguna patraña mientras lo cruzas.
¿Planeas poner a prueba la leyenda? 5 % de descuento en los seguros de IATI
La plaza de Albert Huet
Para completar la trilogía de plazas de Sibiu, tras cruzar el puente llegarás a la de Albert Huet, dedicada a un consejero real y juez del siglo XVI que defendió los derechos de los sajones de Transilvania. Allí se encuentra la catedral evangélica.
La catedral evangélica que ver en Sibiu
Elevada hasta 73 metros del suelo, la torre de esta iglesia es visible desde casi cualquier rincón de la urbe. Esta catedral perteneciente a la iglesia luterana fue construida en el siglo XIV y sirvió como lugar de enterramientos de personalidades y grandes fortunas de Sibiu. Esta práctica fue prohibida en 1796, pero se hizo una excepción con nuestro amigo el barón Samuel von Brukenthal. Como se dice en mi tierra: con perricas, chufletes.
Turnul Scărilor, la torre de las Escaleras
No te vayas de la piata Huet sin visitar la torre de las Escaleras, considerada como la construcción más antigua de Sibiu. Levantada en algún punto entre el siglo XII y el XIII, es un pasaje precioso para acceder a la zona baja.
Otros lugares para visitar en la ciudad alta de Sibiu
¡Pero quieto ahí, que aún no bajamos! Y es que, la ciudad alta de Sibiu tiene más para ofrecerte, además de estas tres estupendísimas plazas.
La fortificación de Sibiu
Ya te pensabas tú que te ibas a ir de Sibiu sin ver una buena muralla. Pues claro que no, ya que, al igual que en otras localidades de Transilvania, en Sibiu también se protegieron bastante, tanto como para haber sido considerada una de las fortalezas más importantes del sudeste de Europa. Aunque la mayoría de fortificación se ha perdido por el camino, todavía puedes ver un buen pedazo junto a la calle de la Ciudadela (strada Cetatii). En un momentico, allí te vas a encontrar la torre de los Carpinteros (Turnul Dulgherilor), la de los Alfareros (Olarilor) o la de los Arcabuceros (Archebuzierilor).
Strada Cetatii, la calle más bonita que ver en Sibiu
Y ojo, que esto no lo digo yo, es que en la misma calle hay un cartel colgado que lo indica. Verdaderamente, la calle de la Ciudadela (strada Cetatii) es preciosa, ya que, además del pedazo de muralla y las torres que te he enseñado, hay varios edificios y fachadas espectaculares, entre ellos el teatro Hochmeister.
Nicolae Bălcescu, la calle comercial
No es tan cuqui como la precedente, pero la calle Nicole Bălcescu, una arteria comercial de la ciudad, también tiene sus cosicas. Es muy fácil de encontrar porque empieza y termina en una de las esquinas de la Gran Plaza. Establecida durante el mismo año en que Colón llegó a América, concentra el mayor número de negocios por metro cuadrado de Sibiu. Vale, este dato me lo he inventado, pero podría ser. Lo que sí que es verdad, es llegamos allí un día a deshora con el grupo fotográfico y nos alimentamos en alguna de las riquísimas panaderías que hay.
Sfânta Treime, la catedral más bonita que ver en Sibiu
Aunque, por una cosa y otra, no pude acceder a ninguna de las dos iglesias antes descritas, no creo que me equivoque si digo que la catedral de la Santísima Trinidad (Sfânta Treime) es la más impresionante. Por fuera no tanto, pero su interior me dejó con la boca abierta. Para mí sorpresa es de principios de siglo XX, ya que viendo los murales que la decoran habría apostado por algo mucho más antiguo.
Los ojos de Sibiu – Un símbolo de la ciudad
No puedo terminar con el repaso a la parte alta sin hacer mención a los llamados “Ojos de Sibiu”, los curiosos tragaluces con forma de ojo que hay en muchos tejados de la ciudad y especialmente en este sector. Aunque algunas fuentes sitúan su origen en el siglo XV, la mayoría hablan del XIX y creen que tuvo que ser idea de algún lugareño, ya que solo se ven en Sibiu y localidades vecinas como Biertan. Pese a que pueda parecerlo, su finalidad no era asustar a los malos ni atraer a los turistas, si no, simplemente, ventilar los áticos, el lugar donde solían almacenarse los alimentos perecederos.
Orasul de jos, la ciudad baja que ver en Sibiu
Y para despedirte de Sibiu, te animo a que te des una vuelta por la ciudad baja. Vale que todos los lugares icónicos estén en lo alto, que es donde estuvo el dinero y la gente que lo tenía, pero “Villabajo” también tiene sus rincones y sus negocios con solera. Así que, si andas bien de tiempo, no dejes de hacerlo.
Y aquí termino este artículo sobre qué ver en Sibiu, una ciudad a la que tras mi primer viaje apenas le dediqué cuatro o cinco párrafos en el blog y tras el segundo me han salido más de 2000 palabras. Y, lo mejor de todo, es que, si vuelvo una tercera, que espero que así sea, seguro que me sigue impresionando. ¿Estás de acuerdo? Se abren los comentarios.
Más artículos sobre el país en mi guía de Rumanía.
La carretera TRANSFAGARASAN - Guía turística | Viajes Nada Incluido
[…] última vez que hablamos de Rumanía fue acerca de Sibiu, una ciudad de Transilvania que me enamoró tras visitarla por segunda vez. En la carretera […]