Chipiona – Bajo la sombra del faro
Fueron mucho los años de mi vida que veraneé en Andalucía. Si algo tengo que agradecer a mis padres es que cada verano con ellos lo dedicábamos a un destino diferente. Supongo que, de una forma u otra, de ahí nació esta inquietud viajera que ahora rige mi vida. Y Andalucía era una de mis opciones preferidas, un lugar al que siempre he ido a ser feliz. Una vez más este destino me esperaba y Chipiona, con su faro, me iba a recordar porque me gusta tanto esta comunidad.
Cómo ir a Chipiona
Por si no conoces la zona, decirte que Chipiona es una localidad costera de la provincia de Cádiz, siendo Jerez la ciudad cercana más importante. Desde ahí es muy fácil llegar en autobús aunque, debido a su tirón turístico, también lo puedes hacer desde Cádiz, Sevilla u otras ciudades andaluzas.
En mi caso, esta visita a Chipiona fue en forma de blogtrip (viaje organizado para blogueros) y la logística del transporte corrió a cargo de Omio, un buscador de tiquetes de autobús, tren y avión en toda Europa. Con ellos llegué a Sevilla, donde me esperaba parte del equipo para iniciar la ruta en coche hasta Chipiona.
Una vez ahí, la bicicleta sería nuestro método de transporte…
… por lo que pudimos descubrir hasta el último rincón de la población gaditana de una manera completamente sostenible.
Gracias a bicicletas Valdés por favorecer esta increíble experiencia.
Dónde dormir en Chipiona
Pese a su pequeño tamaño, el imán playero de Chipiona hace de éste un destino de veraneo habitual. Y por ello, su oferta de alojamientos es abundante. Importante, al ser una localidad de playa, los precios de los hoteles varían mucho según la temporada.
- Uno de los más atractivos de la localidad es el hotel Agaró, en primera línea de playa. Unos 120 euros cuesta la habitación doble.
- Otra opción interesante es el hotel La Española, valorado con más de un 9 en Booking.
- En mi caso me recibieron en el hotel Playa de Regla, también de mucha calidad y con vistas al mar. Unos 80 euros la noche cuesta la doble.
Qué ver en Chipiona
Chipiona es un gran pueblo costero de la provincia de Cádiz, uno de esos destinos donde el calor transforma radicalmente la paz y tranquilidad del resto del año. Nada tiene que ver el Chipiona de los meses de verano con el del invierno profundo, teniendo en cuenta que la población se puede llegar a triplicar en la temporada estival.
Precisamente el objetivo de este blogtrip era dar a conocer Chipiona más allá de un destino de playa. Y desde luego que se consiguió.
Santuario de Nuestra Señora de Regla
Nuestra ruta turística por Chipiona dio comienzo en el monasterio de Regla, uno de los emblemas de este pueblo gaditano.
Para entender la importancia de este monasterio hay que remontarse casi 150 años atrás, época en la que un grupo de Franciscanos desembarca en Chipiona provenientes de Marruecos. Allí empiezan a trabajar sobre las ruinas de la antigua fortaleza de Ponce de León (del siglo XIV), hasta ir dando forma al edificio actual.
Capitaneado por el Padre Lechundi, este monasterio nace con la vocación de formar a misioneros para que trabajen en Tierra Santa y en Marruecos, preparando a casi un centenar de religiosos para esta causa.
En la actualidad, los objetivos religiosos de este edificio van por otro lado, pero a nivel turístico se ha convertido un enclave de mucho interés. Por un lado, el santuario alberga un completísimo museo de motivos religiosos,…
… de yacimientos arqueológicos hallados por los Agustinos en los alrededores y de piezas traídas por los Franciscanos de sus numerosas misiones por el mundo.
Por otro, en el interior del Santuario se encuentra la impresionante biblioteca de Regla…
… el lugar donde los misioneros preparaban la mente para sus viajes. Actualmente es de acceso libre (solicitando permiso) para estudiosos de diferentes áreas. Allí encontrarás libros con más de 500 años sobre sus tapas.
Aquí terminamos esta ruta por el Santuario, una visita que puedes realizar todos los viernes a las 19h durante el verano. A nosotros nos la dio Fray Juanjo, un entrañable y cultísimo Franciscano que cuenta como pocos la historia que alberga este lugar tan especial. Podéis leer más sobre el santuario en el blog de Teresa, una de las organizadoras de esta escapada bloguera.
El faro de Chipiona
Aunque cronológicamente no fue nuestra siguiente parada, turísticamente el faro de Chipiona es demasiado atractivo como para dejarlo en un segundo plano.
Sobre todo si subes hasta su punto más alto a disfrutar de las vistas. Pero vamos por partes.
Y es que con sus 70 metros de longitud, el faro de Chipiona es, entre otras cosas, el más alto de España (y el 21 del mundo), por lo que llegar hasta arriba va a exigirte pierna y pulmones.
Pero tranquilo que, a lo largo de sus casi 350 escalones, hay varios lugares para descansar las piernas.
De todas formas, te aseguro que el esfuerzo merece la pena. ¿No crees?
Desde allí hay una vista increíble del propio pueblo, de los corrales de pesca (de los que hablaré a continuación)…
… de Sanlúcar de Barrameda, de Doñana y de la desembocadura del Guadalquivir. Está claro que cuando levantaron este faro hace 150 años, eligieron el punto adecuado.
Los corrales de pesca
Como buena población marítima, la pesca ha sido una de las fuentes de vida de Chipiona desde tiempos inmemoriales. Y, como se suele decir, la necesidad agudiza el ingenio.
Fruto de ello nacen los corrales de pesca, un cercado de piedra o madera construidos junto a la costa en algunos enclaves de mar. Gracias al subibaja diario de las mareas, son muchos los peces y moluscos que quedan atrapados en el interior de estas murallas de piedra…
… pasando a ser una potencial presa para los marisqueros.
Y es que, pese a que los corrales son de acceso “público”, solo los pescadores pertenecientes a Jarife, la asociación de mariscadores de corrales, tienen permiso de pesca allí. Aquí no hay barcos, ni cañas, ni máquinas…
… aquí se trabaja con la única ayuda de su cuerpo y de su ingenio, de una especie de tridente, un cuchillo grande, una red pequeña y de cuatro gadgets más.
Aunque no hay consenso acerca de si los corrales son un invento árabe, romano o incluso anterior… nosotros pudimos conocer esta tradición de la mano de quienes la honran hoy en día.
Y es que fue el bueno de Andrés quien, a sus muchos años, nos demostró que la edad es solo cosa del DNI. Qué manera de pescar. Si te interesa esta visita (la recomiendo al máximo), puedes solicitarla en la oficina de turismo de Chipiona. Puedes encontrar más información en este artículo de Los viajes de Claudia.
El castillo de Chipiona
Muy cerquita de uno de mencionados corrales se asienta el conocido como castillo de Chipiona, uno de los edificios de mayor importancia administrativa en el pueblo.
Aunque no hay acuerdo acerca de su origen histórico (200 años arriba y abajo) hoy, además de ser la sede de la oficina de turismo y el lugar elegido para muchas celebraciones institucionales en la población gaditana…
… el castillo alberga también un pequeño museo sobre el papel de esta provincia durante el descubrimiento de América.
Bajo mi punto de vista, lo mejor del castillo es su terraza, desde donde hay una buena vista de la costa…
… y de algunas calles de Chipiona.
El centro de Chipiona
Aunque no fue parte de la ruta de este blogtrip, no puedo dejar de recomendarte darte un paseo por algunas de las avenidas principales del pueblo.
Tomando como referencia la estilosa parroquia de Nuestra Señora de La O…
… te invito a darte un garbeo por algunas de las calles que rodean…
… y conectan con dicha iglesia.
Y, cómo no, por su inmenso paseo marítimo, en el que incluso pudimos recorrer en bicicleta al no ser temporada alta.
El museo del moscatel
Por si alguno no está familiarizado con esta bebida, el moscatel es un tipo de vino procedente la uva de mismo nombre. Aunque en cada tierra se produce y se toma un moscatel algo diferente, Chipiona es famoso por el vino dulce que éste genera.
Debido a su fama, además de ser un acompañante habitual en casi cualquier evento en esta tierra, son muchos los negocios dedicados a esta bebida. El museo del moscatel de Chipiona es un ejemplo de ello…
… un interesante establecimiento donde conocer algunos de los secretos de este distinguido vino. Este museo cuenta con su propia viña…
… un museo interactivo y varios espacios con barricas.
Las playas de Chipiona
Aunque el objetivo de este blogtrip era, precisamente, dar a conocer el Chipiona más allá de un buen lugar para tirar la toalla…
… no quiero dejar de recomendar sus preciosas playas. Su extensión, y un mar cálido y tranquilo las han posicionado como un destino veraniego perfecto para familias.
El centro de interpretación del camaleón
Curiosamente, junto a las dunas que se forman en una de esas playas es posible encontrarse con camaleones comunes, una especie autóctona de Chipiona.
En nuestro caso no tuvimos la suerte de verlos, pero sí que visitamos este centro de interpretación (situado a unos 3 kilómetros del centro), donde estudian a fondo a este simpático animalito y donde trabajan por su conservación.
Y es que, humanos de nosotros, son muchos los camaleones caídos en la batalla gracias a esa afición tan nuestra de construir en primera línea de playa. Por suerte, centros como éstos, están evitando nuevos atentados arquitectónicos.
El pinar
Pero la biodiversidad en Chipiona va mucho más allá de los camaleones. Y es que, a pocos minutos de la población se extiende un amplio pinar, ideal para recorrerlo andando o en bici…
… o para descansar un rato y respirar un poco de aire ¿fresco?
Allí nos recibió un miembro del grupo ecologista CANS, quién nos mostró mucha de la magia natural que pervive en esta zona.
El Centro Venturi
Pero no todo en este blogtrip iba a ser aprender. También hubo tiempo de demostrar nuestra falta de equilibrio en el centro Venturi, un establecimiento a las afueras con una sugerente oferta de actividades deportivas y de ocio.
La parte masculina del equipo bloguero con Teresa como invitada estrella debutaríamos en el complicado mundo del paddle surf…
… (bueno, algunos ya lo habían hecho otras veces)…
… y estuvimos durante un buen rato luchando contra la fuerza de nuestra gravedad. No sé cuántos golpes me di pero…
… la foto ya la tengo.
Los atardeceres en Chipiona
Lo dejo para el final pero, podría hacer un post sólo con los atardeceres que nos regaló esta maravillosa localidad andaluza.
Y es que, por su orientación en el mapa…
… Chipiona es un asiento en primera fila…
… para uno de los mayores espectáculos que puede ofrecer la naturaleza.
Casi cualquier lugar es bueno para verlo, aunque mejor acompañado de una copa o un aperitivo en el club SAAM.
Dónde comer en Chipiona
Y ya que nos metemos en harina gastronómica, aprovecho para hacer un resumen alimenticio de todos los sitios donde comimos en este blogtrip:
Casa Juan
Un nombre tradicional para un sitio donde tradicionalmente todo está bueno. Deliciosa la merluza al moscatel.
Restaurante el Náutico Casa Ricardo
En pleno puerto de Chipiona se encuentra el restaurante el Náutico, donde cualquier plato es un acierto, especialmente si es o tiene pescado.
Hotel Monterrey Costa
La última cena la hicimos en el hotel Monterrey Costa, donde no solo comimos deliciosamente un menú muy creativo…
… sino que de postre nos obsequiaron con algunos regalos.
Restaurante La Manuela
No te dejes llevar por su nombre de señora octogenaria, La Manuela es uno de los sitios con más personalidad y estilo de todo Chipiona…
… donde todo está pensado, cuidado, medido…
… y “recontrabueno”.
Uno de los imperdibles de Chipiona.
Con este buen sabor de boca nos despedimos de esta bonita escapada. Solo queda dar las gracias a Teresa, a la oficina de turismo de Chipiona y a todas las empresas que os implicaseis tantísimo en este blogtrip, demostrándonos que Chipiona es una playa bonita… y muchísimas cosas más. No me preguntes cuándo, pero sé que ese faro y yo nos vamos a volver a ver. ¡Hasta siempre!
Más información sobre la zona en mis posts de Andalucía.
Jordi
Pues fíjate que le tengo muchas ganas a la provincia de Cádiz pero jamás había pensado en Chipiona como posible destino. Me ha encantadobla biblioteca!
Sergio Otegui Palacios
Pues pásate una tarde por ahí, al menos a ver esos maravillosos atardeceres 😀 ¡Un abrazo, Jordi!
Chatono Contreras
Genial blog, un gran reportaje
Sergio Otegui Palacios
Muchas gracias, Chatono 🙂 ¡Un abrazo!
Claudio
¡Hola Sergio! A mi también me gusta visitar lugares en temporada baja, y Chipiona tiene muuucho que ofrecer y hacer. Me ha encantado el faro y las vistas desde allí, y la gastronomía, aaay que decir, los pueblos de mar es lo que tienen, ¿no? Ha quedado claro que Chipiona es mucho más que playa. Un saludo de un enamorado de la costa de Cádiz. ¡Un saludo!
Sergio Otegui Palacios
La temporada baja es lo mejor de que exista un verano jaja. Una tierra muy completa y se come muy bien, como a vosotros os gusta. ¡Un abrazo, chicos!
Judith
Seguro que visitar Chipiona en temporada baja ayuda a conocerla más allá de sus playas! Aunque viendo los atardeceres… Quizá dan ganas de sentarse a contemplarlos y no moverse de allí hasta el atardecer del día siguiente. Y así de paso recuperar fuerzas para subir al faro, que por cierto no tenía ni idea de que fuese tan alto y se encontrase en tan buena posición en el ranking mundial.
Sergio Otegui Palacios
Me sumo a lo de que quedarse todo el día viendo atardeceres. Lo malo es que los atardecer solo son al atardecer :'( Jajaj. ¡Un abrazo, Judith!
Kris
Esto que quede entre tú y yo: todo lo que sabía de Chipiona es que una famosa cantante había nacido allí. Y ahora llegas tú y me descubres todo esto. Pueblito andaluz, bodegas, playas,… Vamos que va a tocar incluir este lugar en una ruta gaditana. 🙂
Sergio Otegui Palacios
Yo lo de la famosa cantante también lo sabía… Pero quería evitar mencionarla. Es la innombrable jajaj. ¡Un abrazo, Cris!
Eva
La provincia de Cádiz es todavía desconocida para mí, pero tengo muchas ganas de visitarla. Y por lo que veo por tus fotos, sí o sí tengo que pasar por Chipiona.
¡Un saludo!
Eva
Sergio Otegui Palacios
Hola, Eva! Pues sí, yo he podido estar ya en varias ocasiones por Cádiz y la verdad siempre vuelvo enamorao. Y Chipiona ha sido otra prueba de ello 🙂
Yamila
Como siempre digo, es siempre un placer leer tus artículos: siempre completos y entretenidos, sumando unas fotos de gran calidad. La verdad es que has dejado una sensación hermosa de esta ciudad que quienes estamos de este lado del gran charco, ni conocemos. Me gustó mucho además la posibilidad de recorrerla en bici! Y esos atardecer… increíbles. Siempre me gustaron los faros, y ese, con semejante altura debe ser super interesante conocerlo. ¿Cuántos días recomendás para conocer la ciiudad?
Sergio Otegui Palacios
Gracias una vez más por pasarte por aquí, Yamila 🙂 Nosotros estuvimos un par de días por Chipiona, aunque con un día bien aprovechado puedes ver los puntos turísticos. Eso sí, si te gusta la playa, puedes dedicar un día sólo a eso 😀 ¡Un abrazo!
Patri y Pablo
Tenemos muchas ganas de hacer una ruta por pueblitos de Cadiz y es verdad que siempre solemos pensar en playa…!! Nos has descubierto, como siempre, que Chipiona es mucho más que eso! Menuda pasada el faro y la biblioteca!
Muy buen post! Un abrazo
Sergio Otegui Palacios
Pues sí, amigos, en Chipiona podéis disfrutar de la playa… y de muchas cosas más. Y qué decir de Cádiz en general, un acierto seguro 😀
Debra | Azahar Cuisine
Que bonito fue descubrir cosas nuevas de mi querido pueblo con un grupo de personas tan lindas. Me alegro que te gustase y espero que regreses pronto por nuestras tierras. Debra
Sergio Otegui Palacios
El gusto fue mío, Debra 🙂 Y estoy seguro de que pronto volveré por ahí. ¡Un abrazo!
Covadonga
Maravilloso reportaje de mi querida Chipiona. Una Asturiana que lleva unos añitos visitando esta preciosa localidad . Su turismo mayoritariamente local es siempre divertido y acogedor . Sus gentes , lo mejor de todo. Gracias por tus acertadas recomendaciones. Un saludo . #Lamardeagusto
Sergio Otegui Palacios
Gracias a ti por pasarte por aquí, Covadonga 🙂 Chipiona es un destino perfecto para muchas cosas. ¡Un saludo!
PACO TEMPLAR
Estuve en esas fechas en Chipiona y además de todas las maravillas que cuentas, descubrí una bodega espectacular que se llama El Castillto, cerca del faro. Visita obligatoria para amantes de moscatel, vinos y vermuts a granel en un ambiente fantástico. Gracias por tu blog.
Sergio Otegui Palacios
Muchísimas gracias por tus recomendaciones, Paco 🙂 ¡Un saludo!
Teresa Lorenzo
Muchas gracias por este post cargado de sentimientos Sergio. Se aprecia que te ha gustado mucho mi tierra y las actividades que hemos organizado en #ChipionaNatural. Ese faro y tu os volveréis a ver. Un abrazo desde El Sur del Sur.
Sergio Otegui Palacios
Estoy seguro de que volveremos a vernos. Y al faro también 😉 ¡Un abrazo desde el centro del norte! ^^
Alvientooo
Un post de lo más completo, esta región es una chulada y los planes me han encantado, me lo apunto todito porque estoy pensando hacer una ruta por aquí la próxima primavera.
Sergio Otegui Palacios
Siempre es una buena idea ir a Andalucía. Te van a tratar de maravilla 😀 Y qué decir de Cádiz y sus pueblos…
Eber René
Buen Día Amigos…
Muy bueno el informe de Chipiona, pase una temporada ahí y fue hermoso. Pero les voy a criticar algo solamente en el informe falto nombra a alguien que sino fuera por ella Chipiona sería un pueblito más de Cadíz. Creo que se olvidaron de Rocio Jurado, atracción o imán de este bello pueblo que atrae a todos a sus calles y su historia con ella incluida. Nada eso, después todo lo demás fue genial. Es mi humilde opinión.
Saludos…. Eber
Sergio Otegui Palacios
Hola, Eber. Desde luego, una personalidad clave en la historia de Chipiona. ¡Gracias por el apunte! 😀
José Antonio Valdés
Te has olvidado de la semana grande de carnaval, impresionante la dedicación del pueblo en esta fiesta, culminando el último domingo con una sensacional cabalgata donde todo el pueblo se implica en ella.
Sergio Otegui Palacios
¡Hola, José Antonio! He oído hablar de ella pero, desafortunadamente, todavía no he podido formar parte. Ojalá pueda verla en persona y compartirla 🙂 ¡Gracias!